FRA FRANCISCO PESQUERA, OFMCONV.
Veo en una revista que recuerdan a Jean Vanier fallecido el 7 de mayo de
este año. Me viene a la mente una etapa de mi vida en la que me encontré con su
libro: “Comunidad: Lugar de perdón y fiesta”, escrito a base de los temores,
los fracasos y las alegrías de una vida corriente compartida día a día en sus
comunidades. Fue un aire nuevo en la vida espiritual para muchos que en la
generación de los años ochenta nos sirvió como revulsivo en nuestro crecimiento.
Por eso, ese sentimiento de agradecimiento por su vitalidad, por esa
experiencia profunda que él tenía de la vida comunitaria.
Jean Vanier fue un laico preocupado por las personas con discapacidad
intelectual que le llevaron a crear las “Comunidades del Arca” en el año 1964 y
“Fe y Luz” en 1971. De sus acogidos aprendió y experimentó la vida en común:
“La pobreza de esos hombres que habían sido excluidos le hacían gritar: ¿Me
amas? Esto es lo que me ha impresionado siempre de las personas más débiles“.
En “Jesús vulnerable”, libro escrito como fruto de unos ejercicios
espirituales durante la Semana Santa del 2010, trató de descubrir la
vulnerabilidad de Jesús para que todos acojamos nuestras propias
vulnerabilidades. En este libro J.Vanier dice sobre su experiencia en las
diversas comunidades en las que vivió: “Abrieron mi corazón, lo sosegaron y me
condujeron a vivir lo esencial del amor.” Enriqueciéndose él en esta experiencia
nos enriqueció a nosotros por medio de sus libros y sus conferencias.
De la reflexión de San Pablo: ”Dios ha elegido lo que el mundo considera
necio para avergonzar a los sabios, y ha tomado lo que es débil en este mundo
para confundir a los fuertes” (1Cor1,27), emana su convicción de que todo ser
humano, sin importar sus capacidades, es digno y merecedor de ser amado por los
demás y por Dios, quien se hace vulnerable por nosotros para destruir el muro
que nos creamos y poder así caminar hacía la plenitud de nuestro ser.
En la vida no debemos desaprovechar personas como estas que han vivido experiencias
especiales, han superado pruebas y fracasos personales, han tenido que perdonar
y les han tenido que perdonar, pero han llegado a sentir en lo profundo de ellos
la alegría de la fiesta.
- ARTICLE ESCRIT PER FRA FRANCISCO PESQUERA, OFMCONV.,
PUBLICAT AL BUTLLETÍ DE L’ORDE FRANCISCÀ SECULAR DE CATALUNYA.
ANY 25 – GENER 2020 - NÚM. 229.