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La Fraternidad Internacional por Encarnita del Pozo O.F.S


 

Fraternidad de Granollers Domingo 26 Febrero de 2017

                              La Fraternidad Internacional
por Encarnita del Pozo O.F.S (ex-ministra General de la OFS)


Una vez que se dio la bienvenida a las fraternidades de Sabadell y a los hermanos de Granollers, comenzamos con una oración para ponernos en la presencia del Señor.





Encarnita compartió experiencias, nos habló de la OFS a nivel mundial, con las fraternidades constituidas y las fraternidades emergentes. Transcribo su ponencia:
“Así que a ello voy, comenzando por afirmar que la OFS en este momento está presente en 116 países del mundo con:
 · 70 Fraternidades nacionales Constituidas
 · 40 Fraternidades nacionales emergentes, distribuidas así
-- Reconocidas: 15 
-- Presencia:      25
 · Casos especiales, bajo la responsabilidad directa de la Presidencia, por diversas situaciones: 6


Durante mi servicio como Ministra general he podido experimentar la alegría de la expansión 
de nuestra Orden. La alegría de encontrar nuevos hermanos y hermanas en diferentes partes
 del mundo.   La mayoría en Fraternidades locales que existían pero no habían tenido la oportunidad 
de conectarse con la realidad de la OFS a nivel internacional, viviendo un cierto aislamiento, 
pero a la vez una conmovedora fidelidad a la Iglesia Y a nuestra Regla, que les había llegado por medio de religiosos de la Primera Orden y de la TOR.
No es que hayan aparecido por arte de magia. Fuimos a buscarles   con la ayuda de las diversas Curias Generales, a las que pedimos información sobre la posibilidad de existencia de la Orden Franciscana Seglar en aquellos países en los cuales estaba presente la Primera Orden o la Tercera Orden Regular pero no conocíamos presencias de la Orden Franciscana Seglar, 
Tomamos contacto   con los Superiores Mayores de estas naciones y el resultado fue espléndido. Prácticamente en todas ellas existía la OFS desde antiguo   o se estaba promoviendo,   sea por nuestros hermanos religiosos que por algunas congregaciones   femeninas franciscanas.   
Así, a través del Consejero del área, comenzamos a contactar con personas concretas fueren asistentes espirituales religiosos como con algunas religiosas franciscanas.   Estos primeros contactos nos llevaron a comunicarnos con hermanos y hermanas de la Orden Franciscana Seglar e establecimos un programa para intentar visitar el mayor número posible de estas Naciones. 
De este modo logramos contactar y visitar, al menos,   30 presencias de   la     OFS   sea en Asia,  África   e incluso Oceanía.
Esta es una buena noticia que nos permite constatar cuánto Dios nos ama.   Cuánto Dios ha cuidado amorosamente de tantos hermanos y hermanas que vivían su ser franciscano secular y testimoniarlo evangélicamente desde el “anonimato”.
Esta novedad nos puso en la disyuntiva de cómo informar y ayudar a formar a estos hermanos nuestros.   El Espíritu nos reveló cómo debíamos actuar y, junto a San José, nos proporcionó los medios económicos imprescindibles para ir a su encuentro. Así surgen los Congresos Continentales primero en Asia y después en África. Esta era la manera de poder ayudarles en su formación, hacerles conscientes de que no estaban solos, de que en medio de sus dificultades otros hermanos en países cercanos vivían su propia vocación. Con ellos mismos pudimos  establecer una serie de contactos que les ayudaron
 a crecer, a madurar, y a formarse. En estos países hemos encontrado asistentes espirituales increíbles que han dado vida con tanto amor a la realidad secular de nuestra familia.
Al final de mi intervención  tendremos la oportunidad de ver en un Mapa la presencia de las Fraternidades nacionales en el mundo.   Veremos dónde están las 70 Fraternidades nacionales constituidas, las Fraternidades nacionales emergentes y las nuevas presencias que inician su andadura con una dos o tres fraternidades locales.  Estas últimas acompañadas por algunas Fraternidades nacionales constituidas, que les ayudan s en su formación y les facilitan documentos necesarios en su “lengua de comunicación”.   
Por otra parte existen otras realidades que están confiadas a la propia Presidencia del Consejo Internacional,   cómo es el caso de Tierra Santa, podemos hablar mejor de Jerusalén porque el nombre Tierra Santa lo hemos tenido que adoptar por los problemas políticos que en esta nación existen.   
Así ocurre con Siria, Hong Kong, Taiwán, China continental y Malasia.
En cuanto a la consistencia numérica de la OFS, aún sin ofrecer datos definitivos por la renuencia 
de algunas Fraternidades nacionales a ofrecer datos concretos de la propia Fraternidad nacional  
(casi siempre por motivos socio-políticos) podemos indicar un número de hermanas y hermanos que participan activamente en la vida de su Fraternidad local,  de 214.829 que se corresponde con el 60% de miembros de la OFS, lo que nos lleva a la conclusión de un número total en torno a 360.000 miembros en nuestra Orden. Lo más importante de todo es que la estadística recibida refleja un 60% 
de Fraternidades nacionales que declaran un mayor número de hermanos y hermanas respecto al 2011. Es interesarte saber que esta esta vez han respondido 80 Fraternidades nacionales sobre 116 lo que quiere decir que el sentido de pertenencia y la responsabilidad van creciendo considerablemente.  Esperamos que la próxima Presidencia pueda obtener una respuesta a una estadística más amplia que nos proporcione la consistencia auténtica y definitiva de La OFS en el mundo.





Durante las Visitas Fraternas y Pastorales efectuadas y en los Capítulos nacionales presididos, en algunas Países se observa un progresivo descenso numérico y la senectud de la OFS. Estos casos son preocupantes en Fraternidades nacionales del Norte, Centro y sur de Europa. Pero comienza a percibirse también 
en algunos países de América Latina y América del Norte (Estados Unidos y Canadá). En cambio en los países de cultura Eslava (oriente de Europa) la OFS se desarrolla con vigor, así como la Juventud Franciscana.
Sin embargo, en varios países de África y el Sudeste asiático, la OFS se está desarrollando con solidez y pujanza, pudiendo atestiguar que en los países donde los cristianos son una minoría que no supera el 1% 
el compromiso cristiano y franciscano de vivir y anunciar con el testimonio y la coherencia de la propia vida, así como con la palabra es verdaderamente emocionante  por su autenticidad y nos llama a los países “desarrollados” a un efectivo examen de conciencia, con el fin de purificar nuestras mentes y nuestras vidas de la primacía de las ideologías y del consumo descontrolado. Podemos ver como los “centros de culto” actuales los domingos y días de fiesta son las grandes áreas comerciales. Y nosotros, franciscanos seglares, no somos capaces de liberarnos de esa tendencia estremecedora.
Así pues nos encontramos ante un verdadero desafío de conversión personal y comunitaria, que requiere constancia y el ferviente deseo de revitalizar nuestra Orden huyendo de determinadas actitudes que nos vuelven fríos y apáticos delante de nuestra responsabilidad y de nuestro compromiso de vida evangélica pública y libremente contraído ante Dios, la Iglesia y nuestros hermanos y hermanas.
La Juventud franciscana:
Una realidad de esta buena noticia también evangélica es la presencia de la juventud franciscana 
en el mundo. La Ofs De acuerdo con nuestras constituciones generales   ha promovido sin descanso
 La Jufra, que esta está presente en  71 países del mundo
Está presente en 71 países del mundo, con:
 · 38  Fraternidades nacionales reconocidas
 · 33  Fraternidades nacionales emergentes.
 · 40.000 miembros aproximadamente ya que está sin finalizar la Estadística
Página web de la Jufra
www.ciofs.org/youfra. 
www.youfra.org. 

La vida y la actividad de la Fraternidad internacional se basan en las prioridades establecidas por los Capítulos Generales.   En este momento las prioridades son: formación, vida en familia, presencia en el mundo, comunicación, Juventud franciscana, Fraternidad de nacionales emergentes y los aspectos financieros de la Orden.
Estas prioridades están relacionadas con el tema central del Capítulo general de 2014, en el que reflexionamos sobre cómo gestionar una Orden como la nuestra compuesta por seglares que están involucrados en la familia, en el trabajo, la política y que además de esto tienen que ofrecer su servicio 
a la Fraternidad de cualquier nivel. Evidentemente no resulta fácil y lo hemos podido constatar a lo largo
 de los últimos 12 años de servicio de la Presidencia Internacional de la cual yo fui Ministra y por ello llevamos al estudio del Capítulo y deberemos ofrecer una respuesta a la Orden durante el próximo capítulo general de 2017. 
La Orden en los últimos años está viviendo el paso de una vida de   devoción personal,  a una vida de plena inserción en la fraternidad, con todo lo que conlleva, aproximándonos a lo que hoy debe ser nuestra vocación dentro de la Iglesia con plena fidelidad a la misma, comprometidos  en el campo de la vida social
 y política, así como en la vida apostólica, de la que tanta necesidad tiene la sociedad de hoy con tantas sufrimientos y penurias, a causa de   guerras, violencia, hambre,   abandono de los propios países en busca de paz, de trabajo…,   para luego vivir de manera infrahumana en los llamados países de acogida. Viendo Las informaciones e imágenes que nos ofrecen los medios de comunicación podemos llamar países 
de acogida aquellos adónde llegan nuestros hermanos y hermanas en busca de una vida digna…
En España, como en Europa, especialmente los países llamados occidentales, vivimos una situación de crisis provocada por la falta   de comunicación de la fe,   que   ya no se transmite de generación en generación,  
 la falta de valores,   la comodidad y el consumismo.   Como dijo el Papa Francisco al inicio de su pontificado, con referencia a la Iglesia, así digo yo refiriéndome a la Orden Franciscana Seglar: cómo amaría yo unas fraternidades en las que la austeridad, no la pobreza, fuera   uno de los valores que amásemos
 de corazón. Así podríamos vivir la solidaridad y el desprendimiento en favor de los hermanos y hermanas que en el mundo carecen de todo.   Y me refiero también a nuestros hermanos y hermanas de la Orden Franciscana Seglar.   He tenido la oportunidad de vivir experiencias de todo tipo, sentir el hambre, la falta 
de agua, la sed, dormir en el suelo, queriendo compartir y experimentar allí donde iba la misma vida de mis hermanos y hermanas. No era fácil lograrlo, porque nuestros hermanos religiosos, nuestros Asistentes espirituales se esforzaban por llevarnos a sus conventos y compartir con ello una vida muy pobre, como 
en Malawi, en Honduras. Pero sí puedo dar gracias al Señor que me ha permitido experimentar la dureza 
de su vida, el rechazo de un simple quesito, 
porque no pueden acostumbrarse a comer más de una vez al día.
Abrazar y sentirme querida por un niño de unos dos años, que en cuanto lo tomé en brazos, su corazoncito que palpitaba terriblemente, se recostó en mi hombro con una enorme cara de felicidad porque, según me explicaron, su joven mamá enferma de SIDA tenía cinco hijos y no podía mimar a todos y trabajar en el campo para darles de comer, etc.

Hermanos, nuestra reflexión no puede quedarse en palabras y palabras… Por la fuerza del amor y de la acción de gracias al Padre,  tiene que ser un desafío, un volver a empezar, un comprometernos con el Señor a vivir y amar nuestra Regla que nos presenta un modo de vida, una identidad, que nos tiene que llevar a desear ser santos (R.2)  y restaurar la Iglesia, que también hoy amenaza ruina… “
Después participamos de la Eucaristía y terminamos con una comida de germanor.





Terminamos agradeciendo a Encarnita con un reportaje fotográfico de los años que perteneció a la fraternidad de Granollers y fotos de diversos sitios donde hizo el servicio de Ministra General.



Fº Javier Conejo. OFS